sábado, 20 de octubre de 2012

21 gramos

21 gramos vapulean mi mente
abandonándola a su suerte
en la peligrosa cuneta
de un cielo sin señalizar.
Desde mi efímera eternidad
consigo preguntarme 
cómo algo tan ligero
puede noquear los sentidos
con un golpe tan certero
que debilita la conciencia
y la arrastra hasta el límite
de lo lógicamente ilógico,
para después sumergirla
en el estanque dorado de los sueños
del que quizá nunca vuelva a emerger.
Intento abrir los ojos al mundo,
pero un sentimiento carmesí
los acosa con sus llamas
provocando una total ceguera
largamente deseada.
Abrasada de pasión
intento mover mis dedos,
mas un sentimiento azul
los arrastra a las profundidades
de un mar en calma.
Ahogándome en mi propia espuma
intento mover los labios,
cuando un sentimiento cobrizo
atraviesa mis palabras tendidas al sol
y desordena todas sus letras.
Aturdida por el trabalenguas
intento mover mi corazón
y un sentimiento esmeralda
se despunta entre las rocas
con su belleza duramente tallada.
No hay salida
si un definido arco iris 
de intensos colores
te rodea con su brillo
intentando poseerte.
No hay salida
si 21 gramos golpean tu mente
con la atrayente fuerza
de un huracán sentimental
ávido de efectos devastadores.

                                               A.B.B. 20 de octubre de 2012



La música que me ha inspirado