El tiempo se nos escapa escondido entre palabras vanas y cuando ya no lo tenemos a nuestro lado, nos damos cuenta de que no hemos dicho las cosas que merece la pena decir:
te quiero, qué guap@ estás hoy, me hace feliz tu sonrisa, saberte a mi lado me da fuerzas, el mundo será un lugar frío si tú no estás en él, gracias por compartir tu vida conmigo, nunca olvides lo que vales, perdóname por no habértelo dicho antes...
Y sólo así, cuando dejemos de ser, seguiremos siendo. Porque aquel que nos entrega lo que es, merece saber lo que callamos mientras sentimos.
A mí me salen subtítulos incluso cuando hablo. No tengo remedio.
18 de julio de 2013
Me parece genial esta entrega y no puedo estar mas de acuerdo con el contenido, además es muy satisfactorio decir lo que se siente, sobre todo, cuando se ama.
ResponderEliminarUn abrazo
Hay cosas que precisamente porque amas son difíciles de decir, pero siempre deberíamos decirlas, aun en el caso de que nos perjudiquen.
EliminarGracias por estar ahí y por tus siempre halagadoras palabras.
Besos tocaya