miércoles, 29 de enero de 2014

Cápsulas - José Malvís


Después de creer que me había decidido por una cápsula, tuve que volver a decidir, y ésa no fue mi última decisión. No lo pensé más pese a que estar dentro de ese bucle era bonito. 
Analgésicos, opiáceos, alucinógenos, anticatarrales, excitantes e inmunodepresores, según necesidades.

Gracias, José por tu dedicatoria de luna y estrellas, con café, vino y Manolo García y por nuestras interesantes conversaciones salpicadas, ¿por qué no?, de risas inesperadas.

Ahí va una de las cápsulas excitantes

FUMADOR CUÁNTICO

...de tabaco y alcohol. De esos momentos mágicos, instantes en que uno se enamora de la sonrisa, de la mirada, enamorándose a la vez de la vida. Y las lágrimas se vuelven caricias tiernas entre amargas briznas de tiempo real. Y todo, absolutamente todo desaparece, todo menos...
...los trozos. Los pedazos de vida sacuden de polvo a las neuronas medio oxidadas de tanta moneda, de tanta mierda de colonia cara y piso devaluado. Hoy estoy vivo y mañana mis huesos tendrán alzheimer pero...tú...tú y yo nos encargamos de que cuando suceda, hayamos sonreído en su puta cara, nos hayamos dado un festín de sentidos y fuego. Tan solo es un concepto, si no la filosofía o la física moderna ya habría explicado su sentido pero...no puede, como no se puede tampoco explicar por qué hasta el corazón más negro puede volar en menos de un segundo por culpa de una mujer, un hombre o un paisaje.
...de tabaco y alcohol, de momentos mágicos, de sexo y amor, de caricias y sonrisas, de lava y hielo, de juegos y estrellas junto al mar...Ya me robaron todo una vez y hasta el día que suceda inevitablemente de nuevo, seré como tus besos, como una y gran salada luna llena.

-José Malvís-


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